Charlie Sarria, biólogo marino y defensor de los tiburones, destaca la falta de conocimiento sobre estos animales en España y el consumo inadvertido de su carne. Sarria enfatiza que España se encuentra entre los tres principales países exportadores de carne y aletas de tiburón, pero la mayoría de las personas desconoce esta realidad. Por ejemplo, menciona que al comer cazón en adobo o caldillo de pintarroja, se está consumiendo tiburón sin saberlo. Además, advierte sobre los altos niveles de mercurio presentes en estos peces y los impactos negativos que la pesca de tiburones genera en los ecosistemas marinos.
En cuanto a la presencia de tiburones en la Costa del Sol, Sarria señala que la sobrepesca y el uso de tecnología avanzada han diezmado las poblaciones de peces en el Mediterráneo. La pesca indiscriminada y los métodos no selectivos han llevado a la disminución de especies como el tiburón azul y la tintorera en la región.
El biólogo también expresa su preocupación por la falta de apoyo a la investigación y conservación marina en España, citando el cierre del Aula del Mar de Málaga como un ejemplo. Destaca la importancia de fomentar el cambio desde los pilares políticos, económicos y sociales para lograr una verdadera conservación del medio ambiente.
En resumen, Charlie Sarria trabaja para aumentar la conciencia sobre los tiburones y promover la conservación de estas especies en peligro. Su labor abarca desde la investigación científica hasta la divulgación y educación pública para generar un mayor entendimiento y respeto hacia estos fascinantes animales marinos.
cazón en adobo
El cazón en adobo es un plato típico de la cocina española, especialmente popular en la región de Andalucía. Consiste en filetes de cazón, que es una especie de tiburón, marinados en una mezcla de especias y vinagre antes de ser fritos.
El proceso de preparación del cazón en adobo comienza con el marinado de los filetes de cazón en una mezcla de ajos, pimentón, comino, orégano, vinagre y aceite de oliva. Esta marinada se deja actuar durante varias horas o incluso durante toda la noche, lo que permite que los sabores se impregnen en la carne del pescado.
Una vez marinados, los filetes de cazón se rebozan en harina y se fríen en aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes. El resultado final es un plato sabroso y jugoso, con el sabor característico de la marinada de especias y el toque ácido del vinagre.
El cazón en adobo se suele servir como tapa o como plato principal acompañado de una guarnición de ensalada, patatas fritas o arroz. Es una opción popular en bares y restaurantes, y también se puede encontrar en ferias y festivales gastronómicos en diferentes partes de España.
Es importante tener en cuenta que el cazón es una especie de tiburón que no se encuentra en peligro de extinción y es capturado de forma sostenible. Sin embargo, como mencionó Charlie Sarria, biólogo marino, su consumo en grandes cantidades puede tener implicaciones para la salud debido a los niveles de mercurio que pueden acumularse en su carne.