Salvo para los diabéticos, el uso de edulcorantes en nuestra dieta no aporta nada más que un incremento en el precio de los productos
La Organización de Consumidores y Usuarios acaba de publicar en su último número de la revista OCU Salud un artículo en el que, lejos de unirse a la moda de los edulcorantes, advierte de sus pocos efectos a la hora de perder peso y aconseja moderar su consumo al tratarse de aditivos artificiales que encarecen en gran medida la cesta de la compra.
Para OCU la demonización actual del azúcar no deja de ser una moda absurda y no ve ningún problema en su consumo siempre que se haga con moderación, por debajo del límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud de 50 gramos diarios. En lo que sí se muestra de acuerdo la organización de consumidores es en la necesidad de reducir la cantidad de azúcar o endulzantes en general. Como se recuerda desde OCU, el consumo de dulces, golosinas y refrescos debe ser ocasional con independencia de que estos productos lleven azúcar o edulcorantes.
Una de las conclusiones a las que ha llegado OCU tras analizar el perfil nutricional de numerosos productos que cuentan con una versión sin azúcar además de la clásica es que en pocas ocasiones estos productos van a ser útiles si lo que se busca es perder peso. Salvo en el caso de productos que son originalmente muy azucarados, como las mermeladas o los cacaos solubles, se trata en la mayoría de casos de productos ricos en grasas, de modo que la sustitución de azúcar por edulcorantes no va a afectar a la cantidad de calorías que se ingieren. Se puede incluso dar el caso de productos sin azúcar que engordan más que los originales que sí la llevan, al incrementarse la proporción de grasas utilizadas. Si a todo ello se le une el hecho de que estos productos ven su precio incrementado en una media del 60% respecto a sus versiones clásicas, su consumo no estaría justificado.
Para OCU sigue siendo necesario incidir en la necesidad de cambiar hábitos, educando los paladares desde la infancia para evitar la preferencia hacia los sabores dulces. Sin embargo ello no significa que haya que renunciar por completo al azúcar y si, a pesar de todo, se opta por la opción de los edulcorantes, tener en cuenta que, en general el consumo de aditivos debe ser moderado, especialmente entre asmáticos, alérgicos, embarazadas o menores de 3 años.