🔪 Truco de cocina
Un truco novedoso y sumamente práctico para la cocina diaria es hacer uso de «cubitos de sabor». Esta técnica se basa en preparar tus propios cubitos de condimentos personalizados y congelarlos para tener siempre a mano un potenciador de sabor natural. Para elaborarlos, sigue estos pasos: comienza por seleccionar hierbas frescas que suelas usar, como albahaca, cilantro, perejil, romero o tomillo. Lávalas bien, sécalas y pícalas finamente. Luego, mézclalas con un poco de ajo picado y cáscara de limón para un toque extra.
Una vez tengas la mezcla, distribúyela en una bandeja de cubitos de hielo, rellenando cada espacio con aceite de oliva o mantequilla derretida. Congela. Cuando los cubitos estén listos, transfiérelos a una bolsa hermética para conservar mejor su sabor y frescura. Esta técnica no solo preserva las hierbas sino que también te permite saborizar tus platos de forma rápida y eficiente.
De forma práctica, puedes utilizar estos cubitos en sofritos, salsas o como base para sopas y guisos. Solo necesitas añadir un cubito al inicio de la cocción para enriquecer tus preparaciones. Un consejo adicional: experimenta con distintas combinaciones de hierbas y especias para encontrar el perfil de sabor que mejor se adapte a tus platos favoritos. Esta técnica no solo optimiza el tiempo en la cocina, sino que también reduce el desperdicio de ingredientes frescos.
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