Valencia Gastronómica
El ministerio dirigido por Alberto Garzón advierte de que no todos los rocones de Reyes con nata llevan nata de verdad.
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Si hay un dulce estrella en la Navidad en España, ése es el roscón de Reyes. Los hay rellenos de chocolate, de crema, sin relleno, sin gluten, sin lactosa, con nata… Precisamente estos últimos son los que gozan de un mayor éxito entre los amantes de este bizcocho con sorpresa. Sin embargo, no todos los rocones con nata llevan nata de verdad. A menudo, la industria utiliza otro tipo de ingredientes mucho más perjudiciales para elaborar este relleno.
Así lo ha denunciado esta misma semana el Ministerio de Consumo a través de una campaña en redes sociales. «Es muy común encontrar en el supermercado rocones de Reyes ‘con nata’ que en realidad es un mix de aceites vegetales», explican desde la cartera dirigida por el ministro Alberto Garzón. «Recuerda revisar bien el etiquetado y el listado de ingredientes para garantizar que vas a disfrutar de tu roscón de ‘nata-nata'».
Tal y como se explica en la publicación, la supuesta nata que llevan muchos roscones suele estar elaborada «a base de grasas y aceites vegetales, donde predominan los de palma, coco y otros mezclados con grasas hidrogenadas». Precisamente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó un programa para eliminar de la cadena alimentaria las grasas trans producidas industrialmente y que son las responsables de alrededor de medio millón de muertes al año.
Algunos alimementos contienen grasas hidrogenadas de forma natural en pequeñas cantidades. Es el caso de algunos productos lácteos como el queso o la mantequilla, y también de carnes como las de vaca, cerdo y cordero. Sin embargo, son los productos de bollería y ultraprocesados los que más grasas trans contienen, de ahí que los organismos sanitarios pidan evitar su consumo.
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Pero, ¿cómo podemos saber si un roscón de Reyes está hecho con nata de verdad? Según explica el Ministerio de Consumo, en el etiquetado debe aparecer la nata como ingrediente único del relleno. «Se mostrará como un porcentaje del total del roscón», dicen desde la cartera dirigida por Garzón. Además, este ingrediente debe estar elaborado a base de leche de vaca. También podrá llevar azúcar y algunos aditivos, conservantes y estabilizantes. «Si contiene aceites de palma, de coco u otras grasas vegetales, no es nata, es un mix de grasas vegetales», finaliza Consumo.
Por último, conviene señalar que, al igual que ocurre con el resto de productos de bollería, el roscón de Reyes es un alimento que debe consumirse de forma ocasional ya que, al margen de las grasas hidrogenadas, también contiene otros ingredientes perjudiciales como son las harinas refinadas, el azúcar y la mantequilla. El consumo de estos ha sido relacionado en numerosos estudios científicos con problemas de salud como el sobrepeso, y con un mayor riesgo cardiovascular debido a su elevado índice glucémico. Los roscones elaborados de forma industrial, además, contienen aditivos poco recomendables para la salud.
Se calcula que en España se consumen alrededor de 30 millones de rocones cada año. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) publicó el pasado año un análisis en el que eligió el roscón de Reyes con nata de Eroski como el mejor de esta categoría. «Destaca por un relleno de nata abundante y agradable en boca, y un bollo muy esponjoso con aromas muy ligeros», dijo la OCU.
