El calor de las últimas semanas, la desescalada, el buen ritmo de vacunación y la llegada de turistas de segunda residencia hacen prever a la Asociación Nacional de Heladeros Artesanos (ANHCEA) que este será un buen verano y mejoraran los resultados de la pasada campaña.
El presidente del colectivo, Marco Miquel, muestra su optimismo y asegura que ya han empezado a notar una mayor afluencia de público en las heladerías artesanas de Alicante y del conjunto de nuestro país.
La calidad de producto es uno de los valores de estos establecimientos. Helados innovadores, en su elaboración y sabores, pero que se diferencian de los industriales en calidad y en la ausencia de grasas saturadas.
Y precisamente, para seguir mejorando y diferenciándose, el colectivo ha puesto un especial énfasis en la creación del Centro de Investigación del Helado Artesano que va a tener su sede en Xixona.
Este centro, que si se cumplen las previsiones abrirá sus puertas a mediados de 2023, se instalará cerca de la sede del Consejo Regulador del Turrón de Xixona y Alicante, en un solar cedido por el consistorio.
El centro albergará la sede de la asociación nacional y dispondrá de un laboratorio y de aulas de formación homologadas. Miguel asegura que en este recinto van a poder llevar a cabo estudios científicos y pruebas que estos pequeños empresarios no podrían hacer por sí mismos.
Además, les permitirá avanzar en el uso de técnicas y de productos que demandan los clientes y que se enmarcan dentro de una alimentación más saludable y natural.
En cualquier caso, al margen del futuro del helado artesano, Marco Miquel reivindica el producto que elaboran en la actualidad y que puede competir con los mejores heladeros del mundo. Y prueba de esta afirmación son los resultados que obtienen los profesionales españoles en los campeonatos internacionales.