Los hoteles utilizan el «truco de los tres días» como una estrategia para asegurarse de que el bufé libre, las tarifas de media pensión y las opciones de todo incluido no generen pérdidas. Este truco se basa en la psicología humana y cómo las personas cambian sus hábitos de consumo a lo largo de su estancia:
- Primeros días: Los huéspedes aprovechan al máximo la oferta de bufé libre, media pensión o todo incluido, probando una variedad de alimentos y bebidas.
- Tercer día: La intensidad del consumo comienza a disminuir, ya que los huéspedes se cansan y se vuelven más moderados en su elección de alimentos y bebidas.
- Los hoteles aprovechan esta disminución en el consumo para equilibrar los costos iniciales y garantizar que la oferta no resulte en pérdidas.
Rubén Ubric, director corporativo de bares en la cadena Hyatt, menciona que los primeros días suelen ser de exceso en la comida y bebida, pero a partir del tercer día, los hábitos se moderan y se calcula un promedio.
Este truco se originó en hoteles españoles en destinos caribeños en la década de los 90 y se sigue utilizando, aunque no se aplica igual en Europa debido a los mayores costos. Los hoteles también emplean tácticas en la disposición y presentación de los alimentos en el bufé para maximizar las ganancias, como colocar platos más baratos en lugares visibles y ajustar el tamaño de los utensilios según el coste del alimento.
En resumen, el «truco de los tres días» es una estrategia psicológica que aprovecha cómo los huéspedes cambian sus hábitos de consumo durante su estancia en un hotel con bufé libre o tarifas de todo incluido, permitiendo a los hoteles mantener un equilibrio entre los gastos y las ganancias.