🔪 Truco de cocina
Transformar las hierbas marchitas en un condimento delicioso es una manera eficaz de evitar el desperdicio y de añadir un toque especial a tus platos. Cuando las hierbas frescas como el perejil, el cilantro o la albahaca empiezan a perder su frescura en el refrigerador, puedes deshidratarlas rápidamente en el microondas para preservar y potenciar sus sabores. Este método es tan rápido que te permitirá tener hierbas secas listas para uso inmediato.
Primero, lava y seca las hierbas lo mejor posible para eliminar la humedad, ya que esto facilitará el proceso de deshidratación. Extiende las hojas en un plato apto para microondas, asegurándote de que no se superpongan demasiado. Cubre el plato con una hoja de papel de cocina, que ayudará a absorber la humedad. Calienta en el microondas a intervalos de 20 segundos, revisando y removiendo ocasionalmente, hasta que las hojas estén completamente secas y crujientes.
Una vez deshidratadas, deja que las hierbas se enfríen completamente antes de triturarlas con las manos o pasarlas por un mortero. Guárdalas en un frasco hermético y úsalas para sazonar todo tipo de platillos, desde sopas hasta pastas. Este truco no solo exalta los sabores naturales de las hierbas, sino que también te ofrece una forma práctica de disponer de ellas más tiempo, sin tener que recurrir a las opciones secas comerciales.
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