- El Queso Otatza, de la Quesería Joseba Insausti, de Ordizia (Guipúzcoa) ha obtenido el premio “Alimentos de España al Mejor Queso 2015”
- En las restantes modalidades se han premiado lo quesos Don Crisanto de Vilalba (Lugo), El Acehucheño, de Acehuche (Cáceres), La Abadesa de Valladolid y Los Mazos de Tielves-Cabrales (Asturias)
- Con estos galardones, el Ministerio promociona los quesos autóctonos españoles, que tienen una gran calidad organoléptica, y estimula a los productores a elaborar y comercializar estos productos
25 de abril de 2016. La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha entregado hoy, en el marco del Salón Internacional de la Alimentación y Bebidas Alimentaria 2016, que se celebra en Barcelona, los premios a los mejores quesos españoles de 2015 en sus distintas categorías, así como el premio “Alimentos de España al mejor queso 2015”.
Unos galardones cuyo objetivo es promocionar y dar a conocer los quesos autóctonos españoles, que tienen una gran calidad organoléptica, y estimular a los productores a elaborar y comercializar estos productos.
Los premios se dividen en cinco categorías: Quesos madurados de vaca, de oveja, de cabra, quesos madurados de mezcla y quesos madurados con mohos o queso azul, además del galardón concedido al Premio Alimentos de España al Mejor Queso, año 2015.
PREMIADOS
En esta edición el Premio Alimentos de España al Mejor Queso año 2015 ha recaído en el Queso Otatza, Quesería Joseba Insausti, de Ordizia (Guipúzcoa), que también ha obtenido el premio en la modalidad de queso madurado de oveja.
Queso madurado de vaca: Queso Don Crisanto. Quesería Don Crisanto, SAT. De Vilalba (Lugo).
El queso Don Crisanto presenta la forma característica de bala o peonza, terminando la parte superior en pico. La corteza es ahumada y dura, de entre 1 y 3 mm de grosor, color amarillento-ocre y algo grasienta.
Cuenta con una pasta de textura fina, grasa, semidura, semielástica y densa, de color entre blanca y amarilla, suave al corte, con aroma y sabor característico. Puede presentar ojos en número no muy elevado, de forma redondeada o irregular y de tamaño menor a medio guisante.
Queso madurado de oveja: Queso Otatza, Quesería Joseba Insausti, de Ordizia (Guipúzcoa)
El queso Otatza es de tamaño pequeño o mediano, de uno a tres kilos, cilíndrico, de caras planas y forma regular. La corteza dura y lisa de color amarillo pálido. Las sensaciones olfato-gustativas se caracterizan por un olor penetrante que recuerda a leche cruda y limpia de oveja y a cuajo natural. Su sabor es equilibrado e intenso, con débiles notas a picante y ácido.
De regusto persistente y pronunciado, muy característico del Idiazábal de Pastor. La elaboración tradicional y el aprovechamiento de los pastos de alta montaña, hacen a este queso muy especial, con su textura cremosa y sabor a flores.
Queso madurado de cabra: Queso El Acehucheño, Quesería El Acehucheño, S.L., de Acehuche (Cáceres)
El queso El Acehucheño es de tamaño aproximado de 800 gramos de formato cilíndrico. La textura es entre semiblanda y semidura, de color amarillo pálido con pocos ojos. Aroma intenso, regusto mantecoso, persistente en paladar. Su sabor intenso termina en boca con un picor ligero y agradable.
Quesos madurado de mezcla: Queso La Abadesa, Queserías Entrepinares S.A.U., de Valladolid.
Queso cilíndrico, peso aproximado de 3kg. En la pasta presenta pequeños ojos mecánicos y color de amarillo marfil a pajizo. En boca presenta textura firme de cierta cremosidad y agradable sensación grasa. Sabor equilibrado, ligeramente ácido y salado, intensidad alta de aromas lácticos, recuerdos del cuero o frutos secos.
Persistencia media en boca y armónico postgusto. Marida bien con vinos blancos y tintos jóvenes y de crianza. Perfecta armonía junto a uvas, mermeladas dulces, y rallado sobre platos de pasta o verduras.
Queso madurado con mohos o queso azul: Queso Los Mazos, Quesería Angel Díaz Herrero, de Tielves-Cabrales (Asturias).
Queso de forma cilíndrica, peso entre 2 y 2,5 kilogramos. Corteza natural, blanda, delgada y untuosa de color pardo claro. Pasta blanda, blanca marfil con veteado verde-azulado homogéneo y sin evidencias de pinchado. Olor limpio y con toques a frutos secos, láctico fermentado, muy penetrante y agradable. Textura muy cremosa y untuosa, sin granulosidad.
Sabor equilibrado e intenso, con picante y sin amargor final. Tiene un regusto persistente y recuerda a frutos secos. Se recomienda dejarlo a temperatura ambiente 60 minutos antes de consumir. Se puede disfrutar en salsas, ensaladas y carnes, como entrante o postre, marida muy bien con frutos secos y manzana. Acompaña bien a vinos dulces o tintos con cuerpo.m