🔪 Truco de cocina
En ocasiones, almacenamos hierbas frescas en el refrigerador solo para encontrarlas marchitas a los pocos días. Aquí te presento un método excepcional para mantenerlas frescas durante más tiempo, utilizando el poder del agua y del frío adecuadamente combinado.
Comienza seleccionando las hierbas que deseas conservar: albahaca, perejil, cilantro, o cualquier otra de tu elección. Lava bien las hierbas con agua fría para eliminar cualquier residuo o impureza, luego sécalas suavemente con papel de cocina para absorber el exceso de humedad.
Ahora, llena un vaso con agua y coloca las hierbas dentro como si fueran un ramo de flores. Asegúrate de que los tallos estén sumergidos en el agua, lo que las mantendrá hidratadas y evitará que se marchiten. Cubre las hojas y el vaso con una bolsa plástica para crear un mini invernadero, ¡un toque mágico para extender su frescura! Finalmente, guarda este «ramo» en el refrigerador.
Este truco es ideal para personas que cocinan con frecuencia pero en pequeñas cantidades, evitando así el desperdicio. Además, aquí va un consejo extra: no olvides cambiar el agua cada dos días para evitar que esta se enturbie y mantenga siempre sus propiedades beneficiosas. Este sencillo paso extiende la vida útil de tus hierbas hasta una semana o más, permitiéndote tener siempre ese toque fresco y aromático en tus recetas.
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