El gasto de los hogares españoles creció un 1,4 % en 2015 hasta una media de 27.420 euros, la primera subida interanual desde que comenzó la crisis económica, con el incremento más significativo (9,6 %) en gastos en bares y restaurantes.
La tendencia ha cambiado después de seis años de caídas en los que los gastos familiares se han recortado en más de 4.291 euros (era de 31.711 euros en 2008), según la Encuesta de Presupuestos Familiares de 2015, publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Los hogares españoles aumentaron especialmente sus gastos en el grupo de hoteles, cafés y restaurantes, cuyo importe se incrementó un 9,1 %, debido a que destinaron 207 euros más al consumo de comidas y bebidas fuera del hogar (9,6 %).
El gasto dedicado a mobiliario, equipamiento y otros gastos de la vivienda aumentó un 5,9 %, y el destinado a ocio, espectáculos y cultura subió el 3,9 % gracias a un mayor gasto en vacaciones y en artículos y equipamientos recreativos.
Por el contrario, la partida en la que más disminuyó el gasto en 2015 fue la de transportes, que bajó el 2,1 %, por el menor uso de vehículos personales y de los servicios de transporte.
El gasto en vivienda, agua, electricidad y combustibles disminuyó el 0,4 %, por un menor importe destinado al alquiler y a electricidad y gas.
El 58 % del gasto de los hogares se dedicó en 2015 al pago de la vivienda, agua, electricidad y combustibles (8.710 euros de media), a los alimentos y bebidas no alcohólicas (4.125 euros) y a los transportes (3.158 euros).
Las familias españolas han reducido desde 2006 sobre todo el gasto destinado al transporte (pasando del 14,8 % del total del presupuesto al 11,5 % en 2015), mientras que el gasto en vivienda, agua, electricidad y combustibles es el grupo que más ha aumentado su peso (pasa del 24,9 % al 31,8 % del total).
El gasto medio por persona ascendió el año pasado a 10.960 euros, un 1,9 % superior al de 2014, en tanto que el gasto total en consumo del conjunto de los hogares españoles, medido en términos corrientes, aumentó un 1,8 % hasta 503.815.863 millones de euros.
En términos constantes, una vez eliminado el efecto de los precios, el gasto medio por hogar aumentó el 2,2 % en 2015, con 24.091 euros; mientras que el gasto medio por persona se habría situado en los 9.630 euros, el 2,7 % más.
Según la persona que sustenta el gasto, el año pasado los hogares mantenidos por un ocupado gastaron 31.095 euros, frente al gasto medio de 17.461 euros que tuvieron las familias cuyo sustentador principal estaba en el paro.
Destaca la composición del gasto de las familias formadas por una persona o pareja de más de 65 años, que dedicaron una mayor parte de su presupuesto a la vivienda, agua, electricidad y combustibles (42,8 %), a alimentos y bebidas no alcohólicas (16,7 %) y a salud (4,8 %); y una menor parte a hoteles, cafés y restaurantes (5,3 %), transportes (5,7 %) y enseñanza (0,1 %).
Los hogares con hijos menores de 16 años se caracterizaron por dedicar menos a la vivienda (27,2 %) y más a los artículos de vestir (6,6 %), al ocio y espectáculos (7,3 %) y a la enseñanza (2,3 %).
Las comunidades autónomas con mayor gasto medio por persona en 2015 fueron el País Vasco (con 13.997 euros), Comunidad de Madrid (12.678) y Navarra (12.656), mientras que en sentido contrario se situaron Canarias (9.009 euros), Extremadura (9.034) y Andalucía (9.294).
El gasto medio por persona en País Vasco fue un 27,7 % superior a la media nacional, mientras que el de Canarias fue un 17,8 % inferior que dicha media.